Desde que los probé por primera vez, me he sentido atraído por los vinos de la Ribeira Sacra; frescos, frutales, muy agradables de beber.
Cuando se camina por sus montes, se circula por las carreteras que bordean barrancos que ponen un nudo en la garganta, o se navega por los cañones del Sil, y se atisban esos viñedos imposibles, esa tierra difícil de trabajar, pero que da sus premios a quien la trata como se debe, se aprecian aún más los frutos que estos parajes dan en forma de vino.
En este brevísimo resumen no están todos los que son, y algunos de los que están, pueden ser tachados de no ser. Hay desde producciones escasas, inovadoras y casi "de autor", hasta vinos elaborados sin rubor para llegar al mayor mercado posible, pero que por eso mismo son fáciles y agradables de beber.
Es, pues, un pequeño listado de vinos de la Ribeira Sacra que me han gustado últimamente.
- Adega do Val (DO Ribeira Sacra, tinto joven, Garnacha, Mencía; José Pérez López): rojo picota, brillante, ribete amoratado. Aromas frutales y florales (violetas). Vivo, sedoso y suave.
- Guímaro 2009 (DO Ribeira Sacra, tinto joven 100% Mencía, Guímaro): rojo picota aframbuesado, de capa media, ribetes amoratados. Nariz agradable y de buena intensidad, frutas frescas (frambuesas, moras), flores, levadura de panadería, herbáceo. En boca frutosidad intensa, acidez agradable, y marcados taninos de la fruta.
- Viña Regueiral 2008 (DO Ribeira Sacra, tinto joven, 100% Mencía, Bodegas Regueiral): picota claro, de capa baja, con ribete violáceo. Nariz marcada inicialmente por mucha fruta roja dulzona, pizarra, aromas florales y terrosos. En boca, suave y fresco, muy buena acidez, ligero, retronasal frutal, taninos presentes que dejan un final algo secante.
- Lalama 2006 (DO Ribeira Sacra, Tinto con crianza; Mencía, Garnacha, Brancellao y Mouratón; Dominio do Bibei): violeta oscuro de capa baja, con ribetes violáceos. Nariz de intensidad media, azahar y lilas, fruta roja y vainilla. Paso por boca muy suave, agradable, acidez comedida, retronasal floral, taninos muy delicados.
- Régoa TN 2007 (DO Ribeira Sacra, Tinto con crianza; Mencía, Alvarello; Régoa): picota de capa media, con ribetes violáceos. Flores (lila, azahar), fruta roja madura, balsámicos, punto mineral. Entrada en boca viva, buen cuerpo, taninos presentes, pero muy dulces, retronasal intensamente frutal, final bastante largo.
- Rectoral de Amandi 2010 (DO Ribeira Sacra, tinto joven 100% Mencía, Bodegas Rectoral de Amandi): rojo cereza vivo y brillante, con ribetes amoratados. Nariz fresca, dulzona, cerezas maduras y algo de herbáceos. En boca, ligero, suave, fresco.
- Abadía da Cova (DO Ribeira Sacra, tinto joven 100% mencía, Adegas Moure): rojo cereza con ribetes violáceos. Nariz agradable, fresca y frutal, con alguna nota de flores. Paso por boca suave, sedoso y fresco.
Cuando se camina por sus montes, se circula por las carreteras que bordean barrancos que ponen un nudo en la garganta, o se navega por los cañones del Sil, y se atisban esos viñedos imposibles, esa tierra difícil de trabajar, pero que da sus premios a quien la trata como se debe, se aprecian aún más los frutos que estos parajes dan en forma de vino.
En este brevísimo resumen no están todos los que son, y algunos de los que están, pueden ser tachados de no ser. Hay desde producciones escasas, inovadoras y casi "de autor", hasta vinos elaborados sin rubor para llegar al mayor mercado posible, pero que por eso mismo son fáciles y agradables de beber.
Es, pues, un pequeño listado de vinos de la Ribeira Sacra que me han gustado últimamente.
- Adega do Val (DO Ribeira Sacra, tinto joven, Garnacha, Mencía; José Pérez López): rojo picota, brillante, ribete amoratado. Aromas frutales y florales (violetas). Vivo, sedoso y suave.
- Guímaro 2009 (DO Ribeira Sacra, tinto joven 100% Mencía, Guímaro): rojo picota aframbuesado, de capa media, ribetes amoratados. Nariz agradable y de buena intensidad, frutas frescas (frambuesas, moras), flores, levadura de panadería, herbáceo. En boca frutosidad intensa, acidez agradable, y marcados taninos de la fruta.
- Viña Regueiral 2008 (DO Ribeira Sacra, tinto joven, 100% Mencía, Bodegas Regueiral): picota claro, de capa baja, con ribete violáceo. Nariz marcada inicialmente por mucha fruta roja dulzona, pizarra, aromas florales y terrosos. En boca, suave y fresco, muy buena acidez, ligero, retronasal frutal, taninos presentes que dejan un final algo secante.
- Lalama 2006 (DO Ribeira Sacra, Tinto con crianza; Mencía, Garnacha, Brancellao y Mouratón; Dominio do Bibei): violeta oscuro de capa baja, con ribetes violáceos. Nariz de intensidad media, azahar y lilas, fruta roja y vainilla. Paso por boca muy suave, agradable, acidez comedida, retronasal floral, taninos muy delicados.
- Régoa TN 2007 (DO Ribeira Sacra, Tinto con crianza; Mencía, Alvarello; Régoa): picota de capa media, con ribetes violáceos. Flores (lila, azahar), fruta roja madura, balsámicos, punto mineral. Entrada en boca viva, buen cuerpo, taninos presentes, pero muy dulces, retronasal intensamente frutal, final bastante largo.
- Rectoral de Amandi 2010 (DO Ribeira Sacra, tinto joven 100% Mencía, Bodegas Rectoral de Amandi): rojo cereza vivo y brillante, con ribetes amoratados. Nariz fresca, dulzona, cerezas maduras y algo de herbáceos. En boca, ligero, suave, fresco.
- Abadía da Cova (DO Ribeira Sacra, tinto joven 100% mencía, Adegas Moure): rojo cereza con ribetes violáceos. Nariz agradable, fresca y frutal, con alguna nota de flores. Paso por boca suave, sedoso y fresco.
Hace muy poco tuve la suerte de participar en una cata de vinos de la bodega Ponte da Boga (Ribeira Sacra), qué vinos! Se ha abierto un nuevo mundo de sensaciones para mi, no había probado la Mencía galega, y la verdad es que esconde un gran potencial. Tomo nota de algunos de los que comentas.
ResponderEliminarUn saludo.
Hola, Pep.
ResponderEliminarAllá por Agosto del 2009, comiendo en un restaurante en las laderas del Sil, probé un Ponte da Boga. Me gustó, pero no me pareció memorable.
En la Ribeira Sacra hay vinos digamos "de mercado", sencillos y resultones, y otros más mimados y elaborados que llegan a encandilar.
Hazte con un Guímaro joven o un Regueiral y verás una mencía fantástica. En otra línea van cosas como Lalama y Régoa, distintos pero excelentes.
Y ánimo, descubre la Ribeira Sacra y disfrutarás mucho.
Saludos.
Jorge (Sibaritastur) ya me pasó algunas recomendaciones, creo que ese Guimaro sale en todas las listas, será qüestión de echarle el lazo.
ResponderEliminarDe Ponte da Boga me sorprendió la Mencía de los Alaïs y Capricho de Merenzao, una variedad, Merenzao, que no había probado nunca, muy personal y con una evolución en copa sorprendente. Te paso link por si te apetece leer la cata de Ponte da Boga.
http://taninotanino.blogspot.com/2011/03/ponte-da-boga-caracter-extremo.html
Salut.
Cuando pueda le echaré un vistazo, Pep.
ResponderEliminarSaludos.
Hola, tonecor, y bienvenido.
ResponderEliminarGracias por tu comentario, intentaremos seguir compartiendo aquello que nos gusta.
Saludos.
Muy fan del Lalama 2006. Un saludo.
ResponderEliminarRafa.
http://labodegadelin.wordpress.com/2010/12/27/lalama-crianza-2006/
Hola, Rafa.
ResponderEliminarYo sólo lo he probado una vez, pero repetiré.
Un saludo y gracias por pasarte por aquí.